“- Yo aseguré que daríamos el golpe en las elecciones y ya lo viste: de hecho, fuimos los vencedores. Era de lo que se trataba, ¿no? En una democracia como Dios manda… -rectificó, ante la impropiedad política de la frase hecha-; bueno, quiero decir, en una democraciacomo debe ser, lo único importante es ganar las elecciones. No se nos puede pedir, encima, que gobernemos ni que seamos estadistas y otras sandeces propias de mentalidades autocráticas. Nosotros estamos en la arena política para arrebatar a las masas, sacarles sus votos y defender las libertades del pueblo.
- Ahí está el problema: el pueblo se queja de que todo va de mal en peor…
- Eso es lo que dice [la derecha, que es una autoritaria de narices]. Es un residuo del franquismo; de aquel régimen oprobioso que tenía la manía de edificar y dar trabajo a la gente, pero que se pasó cuarenta años violando los Derechos Humanos, que nosotros hemos restablecido.
- Te acusan de haber fracasado. Los más exigentes dicen que es normal que fracase el Partido que está en el poder, pero que, al mismo tiempo, fracase la oposición, parece inconcebible.
- Son todos unos nerviosos. Espérate a que alcancemos la mayoría absoluta en las próximas elecciones y ya verás lo que es gobernar.”
Lo recogido entre corchetes es una sustitución mía para mantener el interés (actualizado) del texto. Y es que el diálogo anterior tiene como protagonistas a un líder de un partido socialista español, que atiende por Felipe, y a un compañero de partido, de nombre, Enrique.
Forma parte de una novela que, como sabemos, fue escrita durante 1977, hace 33 años.
Es decir, que no tiene nada que ver con la actual situación política, con ningún político de la oposición, ni con el resultado de las elecciones catalanas, ni con ninguna realidad española (lo digo por lo de “Ya verás lo que es gobernar”).
¿O sí?
Créditos:
Transcripción parcial del capítulo VI de … y al tercer año, resucitó, de Fernando Vizcaíno Casas.
Fotograma tomado de un video de Libertad Digital.
- Ahí está el problema: el pueblo se queja de que todo va de mal en peor…
- Eso es lo que dice [la derecha, que es una autoritaria de narices]. Es un residuo del franquismo; de aquel régimen oprobioso que tenía la manía de edificar y dar trabajo a la gente, pero que se pasó cuarenta años violando los Derechos Humanos, que nosotros hemos restablecido.
- Te acusan de haber fracasado. Los más exigentes dicen que es normal que fracase el Partido que está en el poder, pero que, al mismo tiempo, fracase la oposición, parece inconcebible.
- Son todos unos nerviosos. Espérate a que alcancemos la mayoría absoluta en las próximas elecciones y ya verás lo que es gobernar.”
Lo recogido entre corchetes es una sustitución mía para mantener el interés (actualizado) del texto. Y es que el diálogo anterior tiene como protagonistas a un líder de un partido socialista español, que atiende por Felipe, y a un compañero de partido, de nombre, Enrique.
Forma parte de una novela que, como sabemos, fue escrita durante 1977, hace 33 años.
Es decir, que no tiene nada que ver con la actual situación política, con ningún político de la oposición, ni con el resultado de las elecciones catalanas, ni con ninguna realidad española (lo digo por lo de “Ya verás lo que es gobernar”).
¿O sí?
Créditos:
Transcripción parcial del capítulo VI de … y al tercer año, resucitó, de Fernando Vizcaíno Casas.
Fotograma tomado de un video de Libertad Digital.
Clarividente Vizcaíno.....
ResponderEliminarLa verdad, anónimo, nunca oí o leí que le dijeran 'clarividente'; 'fascita' y cosas con ánimo de insultar, sí, muchas veces.
ResponderEliminarEstá claro que 'ellos' sí que no eran clarividentes.
Gracias por venir, como se cantaba antes, y un saludo.