No entraré en consideraciones
sobre el fracaso o no de ella (aunque quiero insistir en mi comentario de hace año y medio sobre el consumo de energía eléctrica como parámetro del éxito de
la huelga): hay sitios donde se ha seguido algo más intensamente, en otros no;
algunos, de huelga o no, no se ha notado; en unos, les han hecho huelga, en
otros, no les han hecho huelga;… vamos de todo, como en botica.
Lo que sí creo que es
para reflexionar es lo que fue de la mañana a la tarde (parafraseando cierto
famoso libro de memorias periodísticas).
Y es que, en mi opinión,
sí puede decirse que hay mucha diferencia entre el mayor o menor seguimiento de
la huelga, y el aspecto de las manifestaciones sobre el particular, en las que,
se quiera o no, había mucha gente… aunque no hubieran hecho huelga durante el día.
De hecho, el pie de la
foto nº 27 del álbum de Libertad Digital, de Carmelo Jordá, (el mismo Carmelo Jordá acosado por piquetes), llega a decir: “La huelga fracasó pero los
sindicatos se consolaron con la multitud que sí quiso acompañarles en la marcha
de Madrid”.
Y esa diferencia (y cuáles
sean los motivos, causas y razonamientos para ella), es sobre lo que hay que
reflexionar.
Y no he visto que se esté
haciendo.
Créditos:
Fotografía de la
manifestación de la tarde del día 29, en la Puerta del Sol, en Madrid, tomada
de El Mundo.
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