domingo, 8 de enero de 2012

Un justo joyero de tamaño ajustado

Al inicio de la temporada 2009-10 publiqué una anotación en la que, entre otras cosas, hablaba del lanzamiento entonces de la colección Joyas literarias juveniles.

En los comentarios a la anotación se dijeron un par de cosas que quiero traer a colación ahora:

El problema de estas colecciones es la distribución. Como en algún momento el kiosco "falle", dejan de suministrarle y ya puede interesarte la entrega siguiente, que te quedas sin ella.

Esto decía yo en un comentario, y a las pruebas me remito: mi kiosquera de cabecera cierra durante el mes de agosto, semana arriba, semana abajo, según caiga el calendario; consecuencia de ello es que las entregas que le distribuyen quedan ‘suspendidas’ hasta que en septiembre se reanima la actividad.

En el caso de esta colección, es lo que me sucedió, con el resultado de que si bien compré los últimos números (60 y 61) el 13 de noviembre de 2010, no fue hasta después de Reyes (en concreto, hoy hace un año), cuando llegaron los atrasados del verano, aunque sólo casi todos, pues el último ejemplar lo conseguí el 5 de marzo de 2011.

Otro aspecto comentado que traigo aquí es el que hizo S.Cid:
Estuve sopesando la posibilidad de hacer la colección y en un tris de lanzarme a ello, pero me echó atrás el problema del que hablamos el otro día y cuyo nombre es "espacio", o mejor dicho: "falta de espacio".

Es cierto que una colección completa impone, pero ésta en concreto, no tanto: ocupa exactamente 75 cm, es decir, justo una balda de una estantería de las normales. En todo caso, más visual que este dato cuantitativo, es este otro visual: la colección completa cabe en ¡sólo una foto!

¡Y qué bien luce!

Nota final:
Entre las diversas joyas que me he estado encontrando estas semanas pasadas, hay un ejemplar de la colección original. Casualidad o no, el ejemplar es el correspondiente a David Copperfield, de Charles Dickens, con adaptación literaria de José Antonio Vidal Sales, puesta en ilustraciones por Alfonso Cerón Núñez. Se trata ya de la tercera edición de Bruguera, con fecha de hace casi 36 años (26 de enero de 1976).

¡Ah! Y es el número 8 de la colección. Como hoy, y como hace un año.

Créditos:
Fotografía de Joyas literarias juveniles, colección completa, en un estante de casa, del autor.
Portada del ejemplar David Copperfield, de la colección original, de 1976 (ilustración de Antonio Bernal Romero).

1 comentario:

  1. Me quedé con las ganas de hacerla. Quizá algún día..., porque la vida siempre ofrece una segunda oportunidad

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