domingo, 28 de diciembre de 2008

Ironía de los libros

Como ya he comentado en otras ocasiones, estoy reordenando mi biblioteca.

Uno de los libros es éste cuya portada acompaño. Al hacer la ficha, se abrió, el solito, de tal manera que pude leer lo que sigue (con la ortografía de la época):

DIMISIÓN.- Deseo de un destino mayor del que se tiene. Hay políticos á quienes les sale bien la cuenta y lo consiguen; los mas se quedan sin el que tienen y sin el que desean.
Esta cruel experiencia ha hecho que sean muy raras hoy dia las dimisiones. Solo la presenta el que sabe á ciencia cierta que va á ser destituido ó el que quiere probar que hace la guerra al gobierno que lo nombró cuando ve que la caida de este está muy próxima; asi se libra de caer también envuelto en su ruina.
Los ministros presentan siempre su dimisión voluntariamente, bien porque se los aconseja su conciencia política ó porque el mal estado de su salud no les permite continuar en el destino.Y luego dirán por ahí que los ministros carecen de abnegación y desprendimiento… merecian en castigo esos maledicentes que se les nombrase á ellos. Entonces verían por esperiencia el sacrificio que hacen algunos ministros que no dimiten por salvar la patria, y cobran 6.000 duros de sueldo contra lo que su conciencia les aconseja y el mal estado de su salud les permite.


El caso es que me ha venido a la memoria esto.

Por cierto, ¿he dicho que hoy es 28 de diciembre?

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