Hoy sólo falta un año para que se cumpla el cuarto centenario del nacimiento de una mujer, Henrietta Maria de Bourbon.
¡Ah, pues bueno!, dirán muchos de los lectores de este diario (el resto dirá ¿de quién?).
Podría decirse que es un ejemplo de mujer por la cual un hombre puede llegar a perder la cabeza. Y bien nos lo puede contar su marido (cuyo 408º cumpleaños hubiera podido celebrar hace solo seis días), más conocido como Carlos I de Inglaterra, pues su cabeza, convencida por una diestramente utilizada hacha, un 30 de enero de 1649 rodó por el suelo del cadalso.
Aunque Tom Milne, en la obra de la que es editor, “The Time-Out Film Guide. The definitive A-Z directory of over 10,000 films”, dice que “play havoc with history”, cuando comenta la película “Cromwell”, lo cierto es que el personaje de Alec Guinness acabó perdiendo la cabeza, tal vez por verse en exceso influido por el personaje de Dorothy Tutin.
Por el contrario, Richard Burton en esta ocasión, fiel a su personaje de Oliverio Cromwell, no se divorcia.
¡Ah, pues bueno!, dirán muchos de los lectores de este diario (el resto dirá ¿de quién?).
Podría decirse que es un ejemplo de mujer por la cual un hombre puede llegar a perder la cabeza. Y bien nos lo puede contar su marido (cuyo 408º cumpleaños hubiera podido celebrar hace solo seis días), más conocido como Carlos I de Inglaterra, pues su cabeza, convencida por una diestramente utilizada hacha, un 30 de enero de 1649 rodó por el suelo del cadalso.
Aunque Tom Milne, en la obra de la que es editor, “The Time-Out Film Guide. The definitive A-Z directory of over 10,000 films”, dice que “play havoc with history”, cuando comenta la película “Cromwell”, lo cierto es que el personaje de Alec Guinness acabó perdiendo la cabeza, tal vez por verse en exceso influido por el personaje de Dorothy Tutin.
Por el contrario, Richard Burton en esta ocasión, fiel a su personaje de Oliverio Cromwell, no se divorcia.
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