Hace un mes (hablando por
extensión, es decir, el último día del pasado mes), se celebró este año el Día de las Librerías.
El caso es que ese día,
para animar la visita a las librerías (así como la compra de libros en ellas),
se organizaron diversos actos en las 1.800 librerías asociadas al
acontecimiento, las cuales ofrecieron una ampliación de horario, y un descuento
del 5%, propio del Día del Libro y de las Ferias del Libro, y máximo que se
permite con el tema del precio fijo de los libros.
Lo irónico de ese día fue
que justo el 30 de noviembre se publicara en el Diario Oficial de la Comunidad
Valenciana la Resolución por la que se concedían los premios a los libros mejor
editados y a la labor de los libreros en la Comunitat Valenciana.
No lo digo por que el
premio al mejor libro ilustrado editado en 2011 recayera en el publicado por la
editorial Media Vaca con el título Milano
(que por el título de la colección en que se encuadra, se refiere a la ciudad
italiana, no al ave), con ilustraciones de Alessandro Lecis y texto de Alessandra
Panzeri.
Es que el segundo punto
de la resolución decía:
“Declarar
desierto el premio a la labor de los libreros en la Comunitat Valenciana para 2012.”
Créditos:
Fotografía del monumento dedicado por “los libreros españoles al libro y sus
creadores”, en Madrid, en el Paseo de Recoletos, cerca del Centro Cultural
de la Villa (o como se llame ahora), en marzo de 2009, del autor.
Es una prueba más de que lo mejor que se podía hacer con esa Consejería es cerrarla.
ResponderEliminarUn saludo
Bueno, con declararla desierta, también ganaríamos algo ;-)
ResponderEliminarUn saludo.