martes, 23 de agosto de 2011

Desde la barrera

Recuerdo una anécdota que nos contó hace mucho tiempo un sacerdote amigo de la familia, formado y con inicio de la práctica del sacramento en los tiempos preconciliares, podría decirse.

El caso es que, encontrándose no sé dónde, coincidió con otro sacerdote, de vete tú a saber qué país europeo (supongo), con quien no podía conversar en español ni en el idioma materno del otro, circunstancias recíprocamente presentes en el compañero. Naturalmente, a pesar del resultado de Babel, no se arredraron, y sin necesidad de de que nadie les indicara nada, ni de que ninguna comisión resolviera lo mejor para ellos, su propio y libre albedrío les encaminó al entenderse sin mayores problemas. Para eso estaba la lengua franca del Imperio, y por extensión, de Europa: el latín.

Con el tiempo, es sabido, el latín se ha perdido, y donde aún quedaba, en la liturgia católica, también se perdió. Y con él, la música.

Nuestro amigo Bate lo ha expresado en diversas ocasiones. Al final, alguien le ha oído, y se ha atrevido también a quejarse. Este pasado mes de abril Joseph Cullen, director de música coral en la Orquesta Sinfónica de Londres, escribió un artículo lamentando la dejadez que tras el Concilio Vaticano II se había producido en la música litúrgica católica.

En la recientemente celebrada Jornada Mundial de la Juventud, en las celebraciones litúrgicas ha habido música, orquesta y coros que, en lo que he oído, han hecho una muy meritoria labor, especialmente al tratarse de ámbitos al aire libre. Sin embargo…

Sin embargo, creo que la inmensa mayoría de la inmensa multitud presente, desconocía los cánticos, precisamente porque su juventud sólo les habrá permitido apreciarlos o participar en ellos, en contadas ocasiones, con lo que, sí, es música, y claro, les suena, pero no la conocen. Y supongo que por muy mal que se module la voz, un cántico interpretado el domingo por dos millones de persones, conociéndoselo, habría puesto, como se dice, los pelos como escarpias. Y hubiera sido una muestra, otra más, de la unidad, voluntad y fuerza del catolicismo.

Pero eso sólo hubiera sido posible de haberlo conocido desde casa,… y en latín.

Y, un suponer, ¡qué distinta hubiera sido la Puerta del Sol si, como una sola voz, los peregrinos presentes hubieran podido reaccionar gloriando a Dios en el Cielo!

12 comentarios:

  1. Pero, como digo, es muy fácil ver los toros desde la barrera, y unos días después.

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  2. Con retraso, acabo de ver el maravilloso video que muestra elentir, de unos jóvenes católicos brasileños, en respuesta a los ataques sufridos.
    En definitiva, por sus obras los conoceréis, ¿verdad?

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  3. Yo lo vi ayer y se me llenaron los ojos de lágrimas. No me avergüenza confesarlo. Es una preciosidad y la llena a una de pura bondad.

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  4. La recuperación del latín que ha hecho SS B XVI(I) la comentaba el otro día en EL MUNDO, no recuerdo si David Gistau o Fernando Sánchez Dragó.
    .
    El palito entre paréntesis corresponde a Benedicto XIII, el Papa Luna, que no consta oficialmente en el listado de Papas. Y ya que estamos en la Comunidad Valenciana hay que reivindicarlo porque es de justicia, según cuenta Luis Suárez Fernández en su biografía.

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  5. A mi me pasó lo que comenta S.Cid: me emocioné y se me llenaron los ojos de lágrimas.
    Eleva el espíritu y reconforta el alma.

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  6. A este Papa se le puede criticar y atacar poco por la desafectación que tuvo lugar en la iglesia católica desde el Concilio Vaticano II por la introspección por parte de Pablo VI del Novus Ordus Missae.

    Concretamente, Benedicto XVI, apostó decididamente por la integración, a través de su Motu Propio por la Misa Tridentina, celebrada en latín. El 7 de julio de 2007 el Papa Benedicto XVI publicaba el Motu propio Summorum Pontificum. Este documento reafirmaba una verdad constantemente negada a lo largo de los 40 últimos años, por la que fue perseguido
    Monseñor Lefebvre, muchos sacerdotes y fieles: la no abrogación del rito romano
    tradicional, llamado también ―
    Misa de San Pío V, y la posibilidad
    para cada sacerdote de celebrar en este rito.

    El R.P. Bugnini, principal autor del N.O.M.: ―
    No se trata solamente de retocar una valiosa obra de arte sino, a veces, de dar estructuras nuevas a ritos enteros. Se trata, en realidad, de una restauración fundamental, diría casi de una refundición y, en ciertos puntos, de una
    verdadera creación nueva.


    Y en esa creación nueva seguimos, navegando por los mares de la desidia litúrgica.

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  7. Un comentario de un católico que me he encontrado en la red y que cuenta de forma magistral lo que yo vengo diciendo, el tío lo ha clavado:

    "Un consejo para los obispos españoles... "¿Quieren que los jóvenes vayan a Misa? Quiten las guitarras que le dan un aire mundano al Santo Sacrificio... Añadan incienso, latín y canto gregoriano para hacerla "más atractiva y misteriosa",(con lo cual llamará necesariamente la atención) y lleven la ortodoxia litúrgica a sus iglesias. También hagan ejercitar la Adoración al Santísimo y enseñen el Catecismo.

    La clave es que los jóvenes distingan lo mundano de lo extraordinario, que es el Santo Sacrificio de la Misa."

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  8. Es señal del problema, amigo Bate, que incluso se oye, como hice yo el pasado domingo, a un sacerdote decir que ahora no es como antes, cuando el sacerdote estaba de espaldas, siendo incapaz de darse cuenta de que en realidad, el sacerdote era el primero de la asamblea (iglesia) dirigiéndose a Dios.
    La edad aparente no permitía suponer que hubiera asistido a muchas ceremonias pre-conciliares, con lo que hablaría de oídas, lo cual, en mi opinión, es peor.

    Un saludo.

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  9. Ese sacerdote iba para politicucho o sindicalista, todo el puñetero día con el pueblo en la boca, cualquier día les va a dar una indigestión.
    Ese sacerdote -con todo mis respetos- es probable que piense que la palabra Sacrificio acarrea unas connotaciones equivocadas, oscuras, ocultas o yo qué sé.

    Estoy hecho un lío.

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  10. "cuando el sacerdote estaba de espaldas"

    ¡TREMENDO!, han perdido el norte.
    Ahora, en cambio, están de cara al pueblo,
    pero le dan la espalda a Dios.

    Desanudé el lío. ¿Rápido, eh??

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