Hoy es el santo de mi padre, a quien felicitamos, además, con fotografías de Cercedilla, su tierra chica en la que se crió: la montaña (Siete Picos), el bosque de pinos, incluso un puente romano, rapaces (no chiquillos, sino ¿un águila?), y por supuesto, caballos y reses bravas.
Pues felicitaciones a don Santiago.
ResponderEliminarNieve, tren cremallera, churros con chocolate, escarcha, olor a chimenea, águilas que te observan, Paquito Fernánadez Ochoa...
ResponderEliminarCómo me gusta el pueblo de tú padre.
Felicidades atrasada.
¡Ah, se siente! Yo las di en persona.
ResponderEliminarMuchas felicidades a tu padre, aunque atrasadas...
ResponderEliminarEste otoño, sin falta, me echaré a conocer esa parte de la Sierra, sobre todo ese puentecito que me ha prendado...
Muchas gracias a todos. Ya se las trasladaré a la primera oportunidad que tenga.
ResponderEliminarAlawen: Pues además del puentecito, está el resto de la calzada romana que subía por el puerto de la Fuenfría... Y sí, el primer otoño es buena época (aunque en realidad las fiestas son por la Virgen de Septiembre, vamos, la Natividad de la Virgen), ¿no crees, Bate?
Un saludo a todos.