“- Eh, un momento, ¿qué está pasando aquí?
Los intrépidos ladronzuelos miraron hacia arriba
para identificar al recién llegado y sus bocas se apretaron al verle. Se
trataba de un muchacho delgado, enfundado en un largo abrigo negro. Alfred y
Agatha retrocedieron asustados, pues el nuevo era bastante más alto que ellos y
que los pillastres. Si así lo deseaba sería bastante fácil para él hacerse con
el botín.
- Os tengo dicho que no quiero veros por este
barrio –el desconocido miraba amenazante al líder de la banda–. Así que ya os
estáis esfumando.
Los tres niños andrajosos relajaron sus brazos y
se quitaron las gorras en actitud de sumisión. Al verlos, Agatha y Alfred
suspiraron aliviados.
(…)
Aquel chico de ojos risueños parecía casi de su
edad, aunque tenía aspecto de ser mucho más experimentado. Lucía una cabellera
castaña repleta de rizos y sus ropas, desgastadas por el uso, asomaban bajo un
desaliñado abrigo de paño. Estaba claro que su aspecto no era el de alguien
acostumbrado a las comodidades.”
El genio que Alfred y
Agatha conocen en su cuarta aventura, resulta ser Adolph (luego Arthur) Marx, más
conocido como Harpo Marx, y es el
personaje que los chiquillos dibujaron esa tarde en BiblioCafé.
Bueno, no sólo los
chiquillos, pues además de la firma de Ana Campoy, mi hija le pidió también una
dedicatoria al ilustrador de los libros, Álex Alonso, y cuando éste le preguntó
qué personaje prefería que le dibujara, mi hija le pidió, precisamente, Harpo Marx, ante la sorpresa del
ilustrador que no se lo tenía preparado.
Ahora ya puedo hablar y
contarlo, y es que tal día como hoy pero de 1888, nacía, claro, Harpo Marx.
Créditos:
Extracto del capítulo 5, Una extraña enfermedad, de El pianista que sabía demasiado, cuarta
de Las aventuras de Alfred&Agatha,
de Ana Campoy, tomado de la primera edición, de octubre de 2012, publicada por
edebé (pp. 90-93)
Imagen de la dedicatoria
ilustrada por Álex Alonso, en el ejemplar de mi hija.
Muy gracioso ;)
ResponderEliminarSí, y resultó simpático el momento del dibujo.
ResponderEliminarUn saludo.