Paseando, no hay mayor
problema, aunque no deja de ser una molestia, por mucho que le inventen un
nombre (Manhattanhenge), pero cuando vas
conduciendo, encontrarte cara al sol, y además con reflejos en el asfalto… es
que no sabes cómo poner el brazo, y te da lo mismo que atardezca o que empiece
a amanecer.
Créditos:
Fotografía del Sol, poco después de amanecer, alineado con una calle, a finales de este pasado mayo, del
autor.
Pues sí, eso de ir a ciegas es bastante molesto y peligroso.
ResponderEliminar:)
Y mucho más cuando el coche que te sigue se empeña en ir pegadito a tu matrícula... ¡Unas cuantas lecciones de física aplicada les daba yo a algunos...!
ResponderEliminarUn abrazo.
En efecto, pero mucha gente sigue conduciendo convencida de que están solos.
ResponderEliminarUn saludo.