El otro día salí de unas oficinas del Ayuntamiento cercano al edificio principal cuando, pasando ya junto a la puerta de éste, comenzó a coger fuerza la llovizna que había. Con objeto de poder desplegar adecuadamente el paraguas que siempre llevo en el maletín, me refugié en… la Librería Municipal.
Créditos:
Portadas de los libros en cuestión.
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Portadas de los libros en cuestión.
pues, amigo posodo, el de la destrucción valenciana de Pompeyo tiene una pinta buenísima... asi que la lluvia sí
ResponderEliminarDe momento, sólo lo he hojeado. Ya contaré. Del libro y de la lluvia.
ResponderEliminarUn saludo.