lunes, 16 de febrero de 2009

El próximo miércoles

Ayer tuvo lugar en Venezuela un referéndum, en el que la mayoría de los votos emitidos fueron favorables a la propuesta gubernamental.

El 2 de diciembre de 2007 ya hubo otro referéndum, con un planteamiento similar, en el que el resultado fue precisamente el contrario.

Sobre esto se pueden decir dos cosas (bueno, muchas más, pero de momento, quedémonos sólo en dos):
  • una primera: creo que no es muy conocido que el deporte nacional de Venezuela es el béisbol. Otro país donde este deporte es muy importante es, claro está, Estados Unidos, en el que, en relación con otro deporte también muy importante, el baloncesto, el ganador de la NBA no se resuelve mediante en un único encuentro, sino al mejor de siete (si no recuerdo mal). ¿Por qué no se hace lo mismo en las cuestiones presentadas a referéndum?

  • la segunda: como no creo que tenga mucho éxito la petición de un espíritu deportivo, reclamemos, al ser cuestiones políticas, un espíritu democrático. Según se lee en la noticia de El País, Chávez más que decir, proclamó "me consagro íntegramente al pleno servicio del pueblo. Todo lo que me queda de vida. Así lo juro, delante del pueblo, de mis hijas, de mis nietos. A menos que el pueblo decida lo contrario, este soldado será el candidato a las elecciones de 2012 para dirigir al país entre 2013 y 2019". La duda que me asalta (chiste fácil, lo reconozco) es si estas palabras tan tranquilas son consecuencia del cambio del resultado o si hay que agradecer un cambio en la persona, porque hace catorce meses, espetó que el resultado negativo del referéndum "fue una victoria de mierda y la nuestra una derrota de coraje".
En resumen, espero que llegue el miércoles para que, como hace catorce meses, se anuncie la convocatoria de otro referéndum en Venezuela para confirmar, o no, esta, ahora, supongo, "victoria de coraje".

¿Cómo? ¿Que espere sentado? ¡No, hombre, pero cómo sois! ¡Qué poca confianza! ¡Pues claro que se convocará otro referéndum! Mirad, sin ir más lejos, igual, igual, que lo que sucederá en Vascongadas en caso de que el referéndum pedido por los nacionalistas y otros terroristas se celebrara y arrojara (sí, lo siento, es la polisemia del español) un resultado favorable a sus posiciones; que sí, que si al cabo de un tiempo alguien pidiera un nuevo referéndum, no hay que tener la menor duda (bueno, tal como va todo, ni dudas ni nada vamos a tener) de que sería satisfecho (me ha venido a la memoria cierta canción de los Rolling, pero no sé ahora cómo encajaría en este contexto).

Lo dicho, el miércoles, día en honor a Mercurio, dios patrón de los mensajeros... y de los ladrones.

1 comentario:

  1. Sí, hay qué ver que los referenda se repiten cuando no sale lo que los protestones quieren. las veces que haga falta, pero, una vez sale lo deseado ¡se acabó de preguntar! ¡se ha conquistado algo irrenunciable! y algo parecido hacen con las leyes. En ese sentido, los progres son políticamente mucho más eficaces que los conservadores, la verdad.

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