“Alemania, 1780. En medio de una batalla entre mentes ilustradas, sectas
y bandas criminales, el joven médico Nicolai Röschlaub es el encargado de
investigar una serie de muertes enigmáticas. Mientras tanto, los carruajes del
servicio de correos están siendo atacados de forma arbitraria: no se roba nada
ni se mata a nadie; sencillamente se les prende fuego, con todo lo que
transportan, tras obligar a abandonarlos a quienes viajan en ellos. ¿Pueden
estos dos fenómenos estar conectados?
Nicolai se dará cuenta de que el caso es más
siniestro de lo que había sospechado cuando descubra que lo que los asaltantes
pretenden evitar es la publicación de la Crítica de la razón pura, de Immanuel
Kant. A partir de entonces, la misión del joven médico será salvar de las
llamas el libro, una expresión del pensamiento ilustrado llamada a abrir el camino
hacia la modernidad.”
Hace un par de días comencé
a leer esta novela, aunque el objeto de la anotación no es hablar de ella.
Tampoco es objeto hablar
sobre si efectivamente hubo o no problemas de tal envergadura para la publicación
de la obra de Kant; o si se trata sólo de una licencia literaria para elogiar
esa “expresión del pensamiento ilustrado
llamada a abrir el camino hacia la modernidad”.
Menos aún sobre si
efectivamente la obra se trata de un “pensamiento
ilustrado” o sobre cuál es el concepto de “modernidad” que se generara tras ella. Entre otros motivos, dos
fundamentales: no recuerdo nada de cuando lo estudié (y no voy a molestar a mi
hija para que me lo explique); y no he leído la obra.
El motivo de la anotación
es mucho más sencillo, aprovechando la coincidencia (o no) de la lectura:
Hoy se cumplen 290 años
del nacimiento de Immanuel Kant.
(Tampoco es motivo de la
anotación proponerme leer la obra para celebrar el tercer centenario. Pero no
prometo nada. Tampoco.)
Créditos:
Extracto del texto de la
contraportada de El libro en el que
desapareció el mundo, de Wolfram Fleischhauer (novela publicada en 2003), tomado
de la primera edición realizada en noviembre de 2011 por Ediciones B, de la
biblioteca del autor.
Pues mi felicitaciones al señor Kant.
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