jueves, 26 de febrero de 2015

¿Leyendo espero?

Último jueves de febrero, y no he localizado en la prensa valenciana (pobrecitos, que pasen y coman, que decían que decía aquélla) ninguna referencia a la Feria del Libro Antiguo y de Ocasión de este año.


Habrá que dejarlo para otra... ocasión.

Créditos:
Fotografía del montaje de las casetas, hace una semana, de la, por mí supuesta, Feria del Libro Antiguo y de Ocasión, en su lugar tradicional de la Gran Vía del Marqués del Turia, del autor.

martes, 24 de febrero de 2015

Para contar la prórroga

La madrina la tocó con la varita, y las humildes ropas se transformaron en un lujoso y elegante vestido de oro, plata y pedrería; luego le calzó unos lindísimos zapatitos de cristal que eran una monada. Cenicienta subió a la carroza, pero antes de partir, su madrina la recomendó mucho que se retirase del baile antes de las doce. Pasada esa hora, cesa el encanto de todos estos objetos, y la carroza vuelve a ser calabaza, los lacayos lagartos, y así lo demás. Las ropas lujosas que ahora vistes, serían las pobres de antes.

El otro día vi un reloj que parecía diseñado específicamente para cuando Cenicienta ya no tuviera problemas con los encantamientos: empezaba a marcar precisamente a las doce.

El problema, en todo caso, sería del príncipe, que tendría que pasar el baile a la tarde, para que funcionara el reloj... de sol.

Créditos:
Extracto de La Cenicienta, cuento de Charles Perrault, en adaptación sin acreditar, tomado de Cuentos de Perrault, publicado en 2006 por Real de Catorce Editores, de la biblioteca del autor.
Fotografía de un reloj de sol, en un edificio de Requena, de febrero de 2015, del autor.

lunes, 23 de febrero de 2015

Un ejemplo de formación… clásica

“Mensajero- Estando de centinela en la colina, he mirado del lado de Birnam y acto seguido me ha parecido que le bosque comenzaba a moverse.
Macbeth- ¡Embustero y miserable!...
Mensajero- ¡Que soporte vuestra cólera si no es así! A tres millas de este sitio podéis verlo llegar. Lo repito, un bosque marcha.

Ya sabíamos que el bosque de Dirnam, finalmente, avanzó sobre la colina de Dursinane.

Por otro lado, suponemos que el ejército de Malcolm iría sin hachas, aun armado con hachas, pues la batalla quedó resuelta durante la tarde.

Pero no por eso habrá que alabar los árboles dejando sin considerar la buena formación de las farolas.

Créditos:
Extracto de la Escena V del Acto V Macbeth, de William Shakespeare, según traducción de Luis Astrana Marín, editada en su día por Aguilar, y reeditada en 2007 en la colección de kiosco Grandes clásicos Aguilar, en el volumen I de las Obras completas de William Shakespeare (pág. 207), de la biblioteca del autor.
Fotografía de la perspectiva parcial de la Avenida Lamo de Espinosa, desde la Avenida del Arrabal, de Requena, en febrero de 2015, del autor.

sábado, 21 de febrero de 2015

Esta semana ha vuelto…


… la Champions.

Quiero decir, he vuelto a ver un partido de fútbol sala de mi sobrino.

Créditos:
Fotografía de un ataque del Penyaroja en el partido de fútbol sala de esta mañana entre el Requena y el Penyaroja A, en la categoría Cadete, del autor.

Hui, no…


…¡demà!

(La Cridà, vullc dir.)

Créditos:
Fotografía de las Torres de Serranos, en Valencia, durante la preparación de lo necesario para la Cridà de las Fallas de 2015, esta tarde, del autor.

jueves, 19 de febrero de 2015

Leer te da medios…



(Pero no te quedes a medias.)

Créditos:
Fotografía del escaparate de la tienda de Calzedonia en la esquina de la Plaza del Ayuntamiento con la calle Barcelonina, en Valencia, ayer por la tarde, del autor.

4+7+1+3=15

No se trata de hacer numerología, sino de aprovechar una coincidencia, para así unir Oriente con Occidente (¡qué bonito queda!) felicitando la llegada del Año Nuevo Chino.


No sé si podré acercarme a alguna de las celebraciones aquí en Valencia, pero sí sé que, en cualquier caso, no estaré entre quienes realicen grandes desplazamientos por el nuevo año.

Créditos:
Fotografía del cartel anunciador para el próximo 21 de febrero de la Cabalgata del Año Nuevo Chino, en la entrada de la c/ Pelayo, en Valencia, ayer por la tarde, del autor.

miércoles, 4 de febrero de 2015

Nieve en la información

Cuando en la frecuencia de un canal de televisión no emite ninguna estación, el receptor lo que muestra es una pantalla llena de puntos blancos fluctuantes, que es como interpreta o descodifica lo que la antena consigue captar. Debido al color blanco (sobre todo cuando los televisores eran en blanco y negro), lo que se veía pasó a ser conocido como ‘nieve’.

De este modo, la nieve nos informa de que no hay nada de qué informar, sino sólo ruido.

Esta mañana, al cabo de un tiempo de que ya hubiera dejado de nevar lo poco que ha nevado en Valencia, ya me estaban enseñando (asombrada la gente con el resultado del fenómeno meteorológico) fotos que a través de las redes sociales se estaban divulgado, y, en concreto, la que sigue.


No negaré que resulta muy curiosa la plaza de San Agustín (en Valencia) con su pequeña capita de nieve sobre la que el paso de los vehículos va marcando unos efímeros raíles.

En esta ocasión viene muy a propósito una frase que he conocido leyendo la segunda parte del Quijote: «dubitat Augustinus», es decir, «San Agustín lo pone en duda». Y es que así era mi primera impresión al ver la foto.

Claro que la duda agustiniana se refería a cuestiones de teología, mientras que mi duda versaba sobre cuestiones de meteorología y fotografía. Aunque, siguiendo con San Agustín, decidí aplicar aquello de «Roma locuta, causa finita», y cada vez que alguien me comentaba la foto en cuestión, yo, en plan romano, sentenciaba su falsedad.

Debo reconocer que tampoco tenía muchos argumentos para la sentencia, pero en opinión eran válidos; sólo dos, a saber:
- poco después del inicio de la nevada (sobre las doce), yo estaba por la calle, y por tanto, capaz de apreciar que no hacía nada de frío sino, en todo caso, algo de fresco, incrementado por la molestia de alguna que otra racha de aire (de hecho, los relojes de la calle marcaban 7º), temperatura por la que los copos de nieve se deshacían en cuanto tocaban cualquier superficie. Por tanto, difícilmente podía haber cuajado tanta nieve en el breve plazo de una hora. Ítem más, la caída de la nieve era suficiente como para poder apreciarla sólo en algunos momentos, pues en otros, prácticamente paraba.


- el segundo argumento es menos ‘científico’, y más personal: sobre las doce y media yo me encontraba, precisamente, en la misma plaza de San Agustín… y no vi nada de nieve en el suelo.

Esta tarde he podido ver que la prensa se ha hecho eco de este despropósito.

En definitiva, que esta anotación me sirve para hablar de la cantidad de nieve que en la actualidad hay en esta sociedad que, indolentemente, se ha dejado saturar con presunta información que sólo es ruido, sin siquiera cuestionarlo, aceptándolo, y como resultado lógico, contribuyendo a que vaya creciendo… la bola de nieve.

Pero eso sí, estamos en la sociedad mejor informada de toda la historia.

Créditos:
Fotografía de la plaza de San Agustín, en Valencia, supuestamente nevada esta mañana, divulgada hasta la extenuación durante el día de hoy.
Imagen del gráfico de temperaturas registradas hoy en Valencia capital, capturada de la página de internet de la Agencia Estatal de Meteorología.

La cigüeña no,...


... ayer no, pero hoy un poco de nieve sí hemos visto en Valencia hace una hora.

Actualización:
Incluyo una fotografía de unos cuantos copos de nieve sobre la manga de mi chaqueta, esta mañana, del autor (la foto y la chaqueta).

lunes, 2 de febrero de 2015

¡La nube, la nube, la nube!


¡Uf, qué poco ha faltado!

Créditos:
Fotografía de la estela de un avión esquivando una nube, un día de viento, en Valencia, en enero de 2015, del autor.

Es que ni pintada...


… saldría mejor la felicitación de cumpleaños.

Créditos:
Fotografía de una pintada en el Chiado de Lisboa, en enero de 2015, del autor.

domingo, 1 de febrero de 2015

Evolución (tecnológica) del idioma

Hace unas cuantas décadas, se puso de moda en el mercado automovilístico el segmento de los coches de gran tamaño en su modalidad de ‘el más grande que haiga’.

Como los tiempos cambian, y la ortografía también, ahora son otros coches los que ay.


Créditos:
Fotografía de un cartel publicitario del modelo Aygo, de Toyota, en Valencia, en enero de 2015, del autor.

¿Saben aquel que diu...

… que por qué están tan altos los semáforos en Lepe?


Para que no se los salten.

Créditos:
Fotografía de un avión pasando por encima de un semáforo, en Valencia, en enero de 2015, del autor.